0:00 Partimos a las 10:45 con los esquís en la mochila. El camino es muy evidente al seguirse la pista, que es a su vez parte de la ruta del GR-11. Ya desde el principio hay algunas zonas umbrías donde hay que ir con cuidado porque se forman placas de hielo, con el peligro de patinazos.
0:24 Pasamos el puente de la Palanca Aiguacari, y poco después empieza a haber nieve, pero no ponemos esquís, porque hay zonas en las que ésta desaparece y sería demasiado trabajo ir poniéndoselos y quitándoselos.
0:31 Pasamos una valla para ganado
0:35 Llegamos a la Cabaña de Santa Ana. Fernando y Arturo se ponen ya esquís, aunque en algún paso posterior es aconsejable quitárselo; el resto seguimos porteándolos.
0:40 Pasamos junto a un poste indicador que señala a la derecha un sendero marcado como Glaciar de Perdiguero, que no tomamos.
0:56 Un cartel señala un amplio desvío a la
izquierda hacia los Ibones
de Batisielles (1h 30'),
Ibón de la Escarpinosa (2h 15') y Refugio de Estós
por Batisielles (3h), pero nosotros seguimos al frente por
la pista, señalada como "Refugio
de
Estós GR-11 1h 30'
". Los que todavía no nos habíamos puesto los
esquís, nos los calzamos ya al haber bastante nieve y
continuidad en ésta. Entre poner esquís y
demás
aprovechamos para hacer un paradilla de unos 15'
1:23 Cruzamos un puente de madera que supera un torrente.
1:43 La pista pasa junto a un cartel que avisa del riesgo de aludes en el tramo que viene a continuación.
1:50 Un poste indicador marca un sendero a la derecha hacia la Cabaña del Turmo (11') y Refugio de Estós (41') por los miradores de las Gorgas Galantes (5') GR-11, sendero que no tomamos para seguir por la pista que también lleva al Refugio del Turmo (10') y Refugio de Estós (40'). A la derecha, al otro lado del río se puede ver la pista, ya que ésta poco más adelante hace un giro cerrado. Un nuevo cartel indica el fin de la zona de aludes (o el inicio para los que bajan).
1:52 Poco antes de la curva cerrada dejamos la pista y el camino normal a Estós, subiendo hacia la izquierda por camino sin marcar; algunas huellas en la nieve nos confirman que debe ser por ahí (descripción de la subida normal al refugio de Estós). Subimos sin camino claro esquivando pinos e irregularidades del terreno, con el barranco del Pino (o barranco de Montidiego) a la derecha.
2:07 Llegamos a una zona despejada, donde el barranco parece continuar al frente, pero no seguimos en esa dirección, sino que giramos hacia la izquierda, subiendo por una ladera que es la verdadera dirección del barranco del Pino. Teresa, que prefiere reservar fuerzas para el día siguiente sigue al frente para después bajar al refugio de Estós.
Subida a la izquierda
en el barranco del Pino
El ascenso es algo exigente y más yendo hundidos en la nieve, a pesar de lo cual subimos con un ritmo fuerte. Algunas huellas de esquís de bajada nos ayudan a orientarnos.
Subida hacia el
Ibón de Montidiego
Nos dirigimos a lo que parece un collado, subiendo por la derecha, aunque hay huellas que indican que igualmente puede subirse por la izquierda.
4:18 Tras la fuerte ascensión a lo que parecía un collado, nos plantamos frente al Ibón de Montidiego, evidentemente completamente cubierto de nieve. El esfuerzo ha sido importante, así que nos tomamos un merecido descanso de una media hora. Al frente tenemos el Collado de Montidiego (por donde volveremos al día siguiente) y un poco a la derecha se adivina una brecha, que es donde nos dirigiremos
4:47 Reemprendemos la marcha continuando por la vertiente de la derecha hasta plantarnos al pie de la brecha, donde la falta de nieve nos obliga a quitarnos los esquís para acabar la ascensión a pie.
Brecha de Montidiego
desde el Ibón.
5:12 Brecha de Montidiego. El pico Montidiego queda a la derecha relativamente cerca, pero la subida es durilla con trepada por rocas y es demasiado tarde para plantearse ascenderlo. Es una pena pero es lo razonable ... y por una vez y sin que sirva de precedente seremos razonables ;-)
El descenso por la vertiente norte (vista de la Brecha desde la vertiente N) es hundidos por nieve suelta, un paquetón de nieve polvo, un sueño para quienes esquían bien y un poco más duro para quienes no lo somos.
Seguimos el valle girando después hacia la derecha. Poco antes de llegar al río, para evitar remar un poco nos embarcamos en una bajada directa que se complica más de lo esperado, embarcándonos un poco. Cruzamos el río por un puente de madera y subida hasta el refugio.
En aproximadamente una hora desde la Brecha llegamos al Refugio
de Estós
El plan original para el segundo día, y plato fuerte del fin de semana, era subir desde el refugio de Estós al Portillón de Oô, flanquear el glaciar de Seil dera Baquo y subir al Collado Superior de Literola, y a quien le quedasen energías ascensión al Perdiguero, y bajada por Remuñé o Literola, cosa para lo que habíamos dejado otro coche más arriba en la carretera. Pero a pesar de lo temprano de la temporada, en un año nefasto de nieves la subida al Portillón está completamente pelada, así que cambiamos de plan, y cambio de vertiente.
0:00 Salimos a las 8:06 del Refugio de Estós con los esquís puestos. Bajamos hacia el río siguiendo valle arriba por la derecha del río.
Subida desde
Estós hacia el Barranco de la Paúl
0:22 Cruzamos el río por un puente de madera y continuamos valle arriba. Poco a poco vamos ganando altura hacia la izquierda con la agradable sorpresa de que el silencio es roto por el insistente canto de un Urogallo.
1:54 Tras subir a un hombro formado por una amplia ladera inclinada, giramos hacia la izquierda para entrar al barranco de la Paúl.
Entrada al Barranco de
la Paúl
Subimos por el fondo del barranco apareciendo al rato el Posets al frente, los Gemelos a la derecha y la cresta de Bardamina a la izquierda. Hacia el final del barranco derivamos un poco a la derecha para después girar a la izquierda pasando bajo el Posets y subiendo al collado que queda un poco a la izquierda.
Ascensión al Collado de la
Paúl
4:19 Collado de la Paúl. Estamos a tiro de piedra del Pico Inferior de la Paul, así que tras una ligera parada en el collado derivamos a la izquierda hacia el pie de la cima rocosa, donde aparcamos los esquís, nos equipamos y en unos pocos minutos estamos arriba.
4:47 Pico Inferior de la Paúl. El viento frío es desagradable, así que no nos entretenemos mucho en la cima. Observamos detenidamente la ruta de bajada, identificando Fernando nuestro siguiente destino, el Collado de Montidiego, que no es muy evidente a la vista. Vista del Posets y el glaciar de Posets, vista de la cresta de Bardamina, vista de la Brecha Carrive y los Gemelos.
Collado de Montidiego
visto desde el Pico Inf. de la Paúl
Bajamos del pico, calzamos esquís y comenzamos el descenso con la cresta de Bardamina a la izquierda, hacia el valle de los Ibones. Tras una rato de descenso, flanqueamos a la izquierda intentando no perder demasiada altura que después debamos subir. Cuando estamos al pie del Collado colocamos focas y comenzamos la ascensión.
6:21 Collado de Montidiego. Vista del Pico Montidiego, vista del Posets y la cresta de Bardamina. Quitamos focas, echamos una última mirada el entorno a modo de despedida de una bonita excursión y comenzamos el descenso hacia el Ibón de Montidiego, que rodeamos por la izquierda y seguimos el descenso hacia el barranco del Pino (o de Montidiego). La bajada al principio muy buena, con espacio suficiente para esquivar pinos, pero después cuando se adentra más por el bosque se complica bastante más al no haber un camino definido, debiendo pasar por donde se pueda, y como se pueda.
Ya en la pista, seguimos esquiando pista abajo ... y pista arriba; el guarda del refugio nos dijo que él prefiere bajar la pista con las focas puestas porque hay ligeras subidas, pero nosotros somos más cabezones (o más vagos) e insistimos bajar sin ellas, así que las remontadas suponen esforzarse remando o haciendo cuñas.
Al final llegamos esquiando bastante más abajo de la cabaña de Santa Ana apurando todo lo apurable, y cuando quitamos esquís descubrimos algunas rayadas profundas, aunque lo más probable es que no se hicieran en la pista donde al ir más despacio éstas serían más pequeñas, sino con alguna piedra en las laderas donde se desciende más rápido. El tramo final ya no queda más remedio que portear los esquís.
En aproximadamente 2 horas y media, sin haber ido muy
rápidos, llegamos desde el collado de Montidiego a los
coches.
Una bonita excursión algo exigente, en la que excepto en el
tramo de
la pista de Estós no nos encontramos absolutamente a nadie.