Ruta:
Subida desde Puértolas
Fecha:
31-5-09
Participantes:
Elvira, Miguel Ángel, Karmelo
Comentarios: Pico bonito y
llamativo, de fácil ascensión con una mínima dificultad en el lapiaz
que lleva a cima.
Subiendo desde Aínsa, en Escalona tomamos la
carretera de la
izquierda señalada como Fanlo, Garganta de Escuaín,
Cañón de Añisclo, Valle de Vió para enseguida tomar
un desvío que asciende a la derecha
dirección Puértolas y Escuaín. Hay que circular con
cuidado porque la
carretera es empinada y estrecha, donde puede haber problemas
si
hay que cruzarse con un coche de bajada. Pasados 0'5 Km. del
pueblo de
Puértolas, o a 8 de Escalona, se llega a la
bifurcación de
la carretera donde hacia la izquierda se va a Bestué y a la derecha
Escuaín, dejándose allí mismo el coche. Disfrutamos a la izquierda
unas excelentes vistas de los Sestrales.
Ascenso al Castillo Mayor, a la izq. en blanco el acceso directo
(nuestro descenso)
0:00 Salimos a las 10:53 siguiendo la carretera de Bestué por algo
menos de 100 m para tomar después un sendero
ascendente a la derecha.
El sendero, bien marcado a pesar de que la vegetación parece
insistir en querer taparlo, avanza junto a un pequeño muro de
piedras.
Inicio de la ascensión
0:23 Collada
Custodia. Llegamos a un prado
que forma un pequeño collado
a la derecha del monte, y donde ya pueden apreciarse las imponentes
paredes que protegen el castillo. El camino sigue siendo evidente, a
pesar de que por momentos la vegetación lo
cierre, dirigiéndose hacia
la
izquierda del castillo, donde está el embudo de
entrada. El calor
es
importante y la vegetación que nos rodea acumula bastante humedad, cosa
que acrecienta la sensación de calor, haciéndonos sudar
generosamente.
Collado Custodia, a la izquierda el embudo de subida
0:54 Nos plantamos bajo las paredes de roca, dejando de lado un
"camino
que
baja directo", y que más parece una torrentera seca. Avanzamos
hasta
llegar al embudo que da acceso al
castillo. El camino está muy trabajado y no sólo por buscar por dónde
pasar, sino porque donde la cosa se pondría más complicada han
hecho una repisa de piedras para la
senda.
Acceso al embudo
La ascensión, aunque gane pendiente sigue siendo fácil, continuando todavía un poco más por bosque.
1:19 Cruzamos un prado, que en esta época está precioso por las flores, y donde los árboles que lo rodean también quieren su puntito de protagonismo floral.
Se acaba la zona boscosa subiendo por una ladera con camino bien marcado que zigzaguea para hacerlo más fácil, habiendo algunos pequeños atajos que más que acortar lo que hacen es erosionar el terreno. No se ve todavía lo que nos espera delante, cosa que en cierto modo pica nuestra curiosidad. Un poco más arriba empieza a haber diversos hitos por diferentes sitios pero todos llevan más o menos al mismo sitio.
1:55 Llano del Castillo Mayor. Nos sorprendemos al ver arriba que hay un valle colgado, una amplia hondonada cubierta de prado, un lugar precioso. Aprovechando la hierba hay un rebaño de ovejas, que no necesitan muchos pastores para controlar que no se escapen, ya que el castillo funciona a modo de redil gigante. En lo alto ligeramente a la derecha se ve arriba el vértice geodésico de cima, aunque un muy evidente camino que cruza el prado avanza un poco hacia la izquierda (después de bajada veríamos que era mejor otro camino que no se ve tanto y que va más directo, estando marcado por hitos de piedra más allá del prado, en la zona del lapiaz).
Subimos ligeramente hacia la izquierda por pedriza algo incómoda, para después tirar bastante a la derecha. La pedriza poco a poco se va convirtiendo en un karst de grandes rocas y fisuras, en las que al parecer suele haber bastantes accidentes de torceduras y cortes. Suponemos que el rodeo que hace el camino por la izquierda es para ganar altura antes de entrar en la parte del karst, más complicada para la gente menos habituada a la montaña, pero al menos para mi mucho más bonita e incluso divertida. Hay formaciones muy llamativas en el lapiaz, como unas cascadas de piedra. Subimos lentos. No se ve la cima hasta casi llegar a ella, por lo que avanzamos un poco por intuición viendo de vez en cuando algún hito desperdigado.
Seguimos subiendo tirando hacia la derecha hasta
ver un par de
árboles que nos habíamos fijado al
llegar al valle colgante, que estaban a ambos lados de la cima, y que
utilizamos de referencia.
A la izquierda el sendero de subida más evidente, por el que
ascendemos.
A la derecha nuestro camino de descenso, más directo y más
recomendable.
A ambos lados de la cima los árboles de referencia
Aunque hemos partido con tiempo despejado las nubes han ido
poco a
poco conquistando el cielo, y ahora de vez en cuando oímos truenos
amenazantes, y hasta nos caen cuatro gotas que avisan de que la cosa
puede complicarse de bajada.
2:46 Castillo Mayor. La cima, marcada por un
vértice geodésico, es
espectacular con
las paredes que caen verticales al vació hacia el Norte. También
"se
supone" que son muy buenas
las vistas del Monte Perdido, pero en nuestro caso
está cubierto. Dan ganas de quedarse un rato en la
cima pero a pocos kilómetros hay nubes tormentosas y se ve que llueve,
así que rapidito para abajo.
De bajada hacia el prado cogemos otro camino más directo, camino muy
bien buscado en el caos kárstico y bien marcado por
hitos. Así bajamos más rápidos,
y al llegar al prado ponemos algunas piedras más en los hitos que
marcan su inicio, para que pueda verse mejor.
Cruzando el prado una manada de sarrios se nos cruza corriendo por delante.
Para acceder al punto de descenso desde el valle colgado conviene
fijarse al
subir, ya
que pese a haber algunos hitos puede no ser claro, pudiendo utilizarse
una charca como referencia, ya que el camino
queda a su
derecha.
Acceso del descenso
Descendemos por el camino de subida hasta llegar a la salida del embudo, y empezar el flanqueo horizontal bajo las paredes. En ese punto dejamos el camino que llanea, y por el que hemos venido, para coger el otro que baja directo, en fuerte pendiente y sin concesiones.
Tras un exigente descenso, justo después de pasar por un abrevadero llegamos a una pista. Cogemos la pista a la izquierda y en 12' llegamos a la carretera de Bestué, que siguiendo otra vez a la izquierda en 18' llegamos al coche.
La ascensión por el camino directo es bastante más corta pero mucho más dura, aparte de no tan bonita como la otra. Yo claramente recomendaría la subida desde la bifurcación de la carretera, pero si se quiere ir por el directo lo que hay que hacer es desde la bifurcación Bestué-Escuaín seguir la carretera de la izquierda hacia Bestué, en 1'5 kilómetros tomar una pista de cemento que asciende a la derecha señalada como "Montaña de Sensa", y en 15' a pie o un par en coche, en una extensión justo antes de que la pista pase por encima de un torrente, empezar la ascensión, punto marcado con un hito.
Sugerencia: Con tiempo
puede
darse incluso la vuelta al castillo, subiendo desde el valle superior
hacia la derecha (ruta de subida a cima más fácil), y seguir después la
cresta hasta el vértice geodésico, y desde allí continuar por arriba
hacia el Oeste hasta la Peña L'Ombre, extremo occidental del castillo,
bajando después directos al prado.